Los estragos causados tras la tormenta creada por George W. Bush parece que van poco a poco remitiendo. Un solo hombre que consiguió llegar al poder mediante técnicas fraudulentas en Florida, que consiguió «semi-engañar» al mundo mostrando armas de destrucción masiva en Irak, que consiguió burlar y desobedecer (nada dificil) a la ONU, que pretendió reprender una guerra fría rodeando a su antiguo enemigo, Rusia, con escudos antimisiles y medidas ofensivas así como despliegue de armas nucleares, facilitando armamento a Israel y a otros paises con claro sentimiento pro-bélico y que ha sumido a su país en una de sus peores crisis de toda su historia y un larguísimo etcétera parece que van remitiendo.
Por primera vez y desde la era de la perestroika parece que las dos potencias nucleares vuelven a dar pasos importantes respecto al desarme nuclear que, pese a que se han reducido a la mitad las armas nucleares existentes en los años 80 en plena guerra fría, siguen existiendo unas 27.000 cabezas nucleares que, a modo gráfico conseguirían arrasar la vida en el planeta entre 5 y 7 veces y de todas esas cabezas nucleares el 90% pertenece a Estados Unidos y Rusia, de ellas 12.000 están desplegadas, es decir, que su uso si se deseara sería inmediato.
La razón está clara y se llama Obama y eso no significa que Obama sea Dios o un santo pero si tiene más a la comunicación y Rusia está de acuerdo en participar con Obama respecto a un avance en lo que armamento nuclear se refiere volviendo a hablar de desarme. La idea de Obama es cambiar la mentalidad de guerra del pasado como eran las armas nucleares y a su parecer y creo que al parecer de todo el planeta, es una idea obsoleta y vergonzosa del pasado.
El problema no es Obama pero si Washington y es hasta donde van a consentir hacer a Obama, pese al anuncio de la retirada de Irak, la misma semana tras la toma de posesión de Obama a la presidencia de Estados Unidos se saldó con dos bombardeos a Afganistan que causó la muerte a decenas de inocentes y es que, al pentágono no le ha gustado nada la idea de la salida de Irak y parece que a cambio Obama haya dado carta blanca a su ejército en Afganistan y es que, por todos es sabido la gran presión que está ejerciendo el pentágono a la Casa Blanca tras el anuncio de esa retirada en Irak.
Esperemos que el desarme deje de ser algún día palabras y se convierta en una realidad y dejen de existir esas monstruosidades símbolo de la vergüenza y debilidad humana.
Fuente: La Vanguardia