Dicen en todas las encuestas que los mejores trabajos se encuentran en el deporte como futbolistas profesionales, en la ciencia como astronautas o en la informática trabajando para Google pero yo creo que he dado con el mejor trabajo del mundo, el de un político y a los hechos en la Asamblea de Madrid me remito.
Veamos esta imagen:
En la primera encontramos a un diputado del PSOE realizando una serie de garabatos en la orden del día en la Asamblea de Madrid, en la segunda encontramos a una diputada de Izquierda Unida haciendo unos sudokus y por último y quizás el más discreto, un diputado del PP jugando a algo similar al Tetris mientras su comañera Esperanza Aguirre esplicaba algo en el estrado que por lo visto a muy pocos interesaba. Quizás el hecho de ser víspera de San Isidro (fiesta) fuera algún tipo de condicionante para este «exceso de trabajo» por parte de los políticos que cabe recordar que cobran alrededor de 3.800€ brutos al mes.
Este gran trabajo coincide con el primer día de la prohibición de la entrada de público a esta escena política nacional, quizás con razón y para evitar este bochornoso paisaje por parte de estos desgraciados de todo tipo y colores que cobran del erario público por hacer el pamplinas con un buen salario que muy pocos obreros pueden soñar.
Quizás sea el hecho de la prohibición de la entrada a invitados, algo que ha acabado por multiplicar la desvergüenza de los políticos, si, esos que a veces dicen que están en representación del pueblo, esos que tan solo hace un mes se subían a las paredes tras la prohibición de la entrada de botellas de agua porque más de uno tenía el accidente de que se cayera sobre el instrumental electrónico y cargarse toda una votación.
Que bonita es la democracia, ¿verdad?
Fuente: El Mundo