La pareja fué a comer al McDonalds y al marcharse el hombre se olvidó el movil en el restaurante en Fayetteville (Arkansas) y con el tiempo pudieron recuperar el dichoso teléfono. El problema es que en ese teléfono tenía guardadas fotos de su mujer desnuda y estas fotos en cuestión de días circularon por internet incluso mostrando el número de teléfono de la pareja recibiendo por ello mensajes y llamadas ofensivas y oscenas.
Al buscar el origen de esas llamadas pudieron ver que la razón era porque su teléfono y sus fotos habían sido publicadas en una web de contactos y tuvo un éxito rotundo viendo el resultado aunque posiblemente no esperado por la pareja.
Ahora, piden a McDonalds una reclamación de 2,5 millones de euros por daños y perjuicios dado que fue ahí donde estraviaron su pornoteléfono. Como no se al final como acabará aunque supongo que la sensatez dirá a este par de personajes que su demanda se la pueden meter por donde les quepa, posiblemente después le toque a Google por indexar webs de contactos como esa, o a la empresa de Hosting que aloja la página de contactos o al fabricante de móviles por incorporar una cámara en dicho movil, el tema es dar por culo y no decir públicamente «pues si, perdí el movil con mi parienta en pelotas y soy gilipollas».
Fuente: 20minutos