Ahora que han finalizado (esperemos que sea así) la resaca electoral, volvemos a ver una pelea absurda donde se peleaba por quien era el mayor defensor del «animalismo» y quien merecía ser el portavoz de los animales en el Congreso y en el Senado.
Los autoproclamados defensores del animalismo, por un lado simpatizantes de «Podemos» y su «Círculo Animalista» y por otro los simpatizantes de PACMA con años de experiencia en la defensa por los animales fuera del congreso pero si en las calles se han enzarzado en discusiones donde era más fácil encontrar chanzas, indirectas e insultos que una verdadera discusión sobre si convergencia o no convergencia.
Desde mi punto de vista (es mi blog y pongo lo que me sale de los mismísimos) no estoy de acuerdo ni con la convergencia ni con la idea de que un representante sea capaz de defender a los animales, ni siquiera un partido. ¿Por qué?
Si debe haber convergencia pero no de partidos sino de personas. Voy a partir de la base de la APDDA. Una unión de diferentes personas y diferentes partidos con uan idea en común, la idea de defender a los animales. Aunque una persona vaya de animalista, aunque un partido vaya de animalista, cada cuatro años se realizan elecciones, eso significa que en cuatro años puede que toda una batería de propuestas y proyectos se vayan al traste porque, de repente, el dibujo del senado o del congreso ha cambiado radicalmente ergo todo lo defendido para aumentar el castigo por maltrato animal, mejoras de bienestar animal o prohibiciones como su uso en circos, zoos, venta, etc puede desaparecer de un plumazo sin haberse llevado a cabo para nada.
Ahora bien, si en lugar de una persona o una serie de personas, si en lugar de un partido o una serie de partidos, se lucha por la concienciación hacia el cúmulo de personas por la lucha por la defensa y bienestar animal, esa idea puede permanecer independientemente de quienes estén en el congreso o en el senado.
En la APPDA podemos ver miembros de CDC, PSOE, PSC, Podemos, PP, CIU, ERC, ICV, IU, Los Verdes, Equo, PNV y CHA. Si, compañeros y compañeras, el animalismo no sabe de colores. Si, hay que buscar una coalición pero sin líneas rojas donde la idea y las ganas de la gente tenga mayor peso que sus colores políticos.
¿Qué tipo de carnet se le da a alguien para hacerse llamar «el verdadero, genuíno y único animalista»?, ¿quien puede asegurar que una persona u otra, independientemente de su partido es animalista o no lo es?
Esto viene a raíz tanto de los insultos vistos estas últimas semanas entre gente de Podemos Animalista y PACMA incluído boicoteo en asambleas de Pacma por parte de los primeros así como también algo que me ha tocado la moral en un día no muy alegre y es el estado de un candidato a senador de Podemos que, al no haber salido, la lucha por el animalismo en el Senado ha desaparecido.
¿Qué me estás contando? ¿Que o eras tú o nadie?
Cierto es que estoy muy, muy cansado de demagogia, mentiras e hipocresías estas últimas semanas y de nuevo, esa lucha inter-animalista entre persona que por sus siglas se consideran enemigos que se suma ya a la lucha del especismo, de dar mayor valor a toros, perros o gatos frente a otros animales que también son víctimas de maltratos, abandonos y una legislación injusta (roedores, caballos, vacas, exóticos, osos, reptiles, etc) donde incluso sus derechos no están ni reflejados o en el limbo.
El animalismo no sabe de partidos, no se puede apostar todo a una persona o todo a un partido sino a una idea, la idea de la defensa animal, que sean estas personas quienes en sus propios partidos hagan llegar la voz de los animales, que sean estas personas que con su voz hagan llegar la voz de los animales al congreso o al senado. Dejémonos de sectarismo, de escalafones o medallas de «yo soy animalista» mientras se promulgan leyes exclusivas a unas determinadas especies y no a las demás. Hazte llamar «pro-perros, pro-gatos y pro-toros» pero no te hagas llamar animalista cuando el resto de animales te la traen floja.
Por la otra parte, imaginemos que llegamos al sueño e ilusión de que el PACMA consigue un representante en el congreso o/y en el Senado. ¡Sería genial! Pero recordemos que ese representante no tendría ni voz ni independencia sino que formaría parte del grupo mixto y sus propuestas deberán ser debatidas por dicho grupo del que formarán parte partidos parlamentarios minoritarios (gente expulsada del PP o del PSOE, diputados de Bildu, de GB, de Coalición Canaria, de UPN, etc) ¿Adivináis cual sería el resultado de esas propuestas? ¡Ni tan siquiera llegarían al congreso o al senado!
Seamos sinceros, dejemos de engañar a la gente con sus ilusiones de ayudar a los animales con ideales que no existen, con poner un rostro o unas siglas al animalismo. Olvidemos los vetos y acordémonos de las personas que puedan hacer llegar la voz de los animales.